Nos levantamos en nuestro cómodo hostal de Ljublajana y lo primero fue mirar el tiempo porque decían que hoy iba a estar lloviendo, pero de momento hace solazo e internet nos dice que puede llover por la tarde, así que bajamos a desayunar que hoy tocaba un día muy especial, visitar los lagos Bohinj y Bled.
Como ir a Bled y Bohinj desde Ljubljana
Es muy sencillo ir de Ljubljana a los lagos Bled y Bohinj en transporte público. Lo más sencillo es ir directamente a la estación de autobuses, muy cerca del centro y allí preguntar por el bus a los lagos, pues el mismo bus pasa por ambos destinos.
Nosotros ponemos rumbo a la estación de buses donde compramos billete hasta Bohinj por 9€ y nos montamos en el autobús para ir disfrutando del paisaje.
El lago más famoso y típico es el de Bled, mientras que el de Bohinj, que está a unos 40 minutos después de pasar Bled, es menos conocido y frecuentado por turistas, pero a los propios eslovenos y gente que conocimos por allí les gusta más, así que decidimos ir a comprobarlo y así veríamos los 2: Bled y Bohinj.
El bus salió a las 10.00 y los paisajes por los que pasamos, todo verde, fueron espectaculares. Llegamos a Bled sobre las once y cuarto, que es donde se bajó casi todo el autobús, y a eso de las 12 de la mañana llegamos a Bohinj, nosotros y un chico más.
Lago Bohinj
Nada más llegar a Bohinj sabíamos que habíamos acertado. No había casi nadie, una iglesia, un puente que cruzaba el río y enfrente, el maravilloso lago Bohinj entre las montañas.
Nos pusimos a andar y vimos una pequeña calita libre para nosotros, ideal!! Dejamos allí el cargamento de cosas que habíamos comprado en Ljubljana en el supermercado de al lado del hostal para pasar el día, y nos sentamos a disfrutar de las vistas.
La temperatura había bajado y entre las montañas hacía más fresco, pero el tener el lago totalmente transparente y que no cubría casi nada al principio incitaba a bañarse, eso sí, ¡Qué agua más fría!. 😮 Pero nos vino de lujo para recuperarnos de la paliza del día de Venecia, los tobillos se nos deshincharon y fue uno de los mejores momentos de todo el viaje.
Había alguna persona en las calitas de al lado, pero están bien separadas y prácticamente no ves a nadie y menos aún oyes ninguna conversación. Al menos cuando fuimos nosotros eso era un nido de paz..
Aprovechamos a descansar, relajarnos, tomar el sol, comer, relajarnos y disfrutar de las maravillosas vistas del lago y las montañas. Sin duda, totalmente recomendable ir a Bohinj.
Como ir de Bohinj a Bled
Después de las 2 y media nos fuimos con bastante pena para coger el bus a visitar Bled. y ¿Como ir a Bled? Pues muy sencillo, para ir de Bohinj a Bled hay que coger el autobús que hace el recorrido inverso al de la mañana, es decir, de Bohinj a Ljublajana, parando en Bled unos 40 minutos después de salir. Los horarios del bus estaban colgados en un papel de la parada de Bohinj, por lo que nosotros nos apuntamos para coger el bus que pasaba a menos diez en dirección Ljubljana, para pararnos en Bled y ver las diferencias. EL bus de Bohinj a Bled fueron 4€.
Lago Bled
A eso de las 15.30 el bus nos para en Bled y aquí ya si que vemos a bastante gente, puestos de helados, tiendas y de todo. Comenzamos a andar ya que hay que rodearlo, vimos las piscinas que estaban repletas de niños y a medio camino empieza a llovernos, una pena pero decidimos dar media vuelta hacia el pueblo, pero por suerte sólo fueron ni 5 minutos de lluvia.
Rodeamos de nuevo el lago pero esta vez en la otra dirección. Vimos las famosas barquitas, el castillo en la montaña, la islita.. todo muy bonito, más fotogénico, más turista, pero menos «natural» y para bañarse la cosa está más difícil. Al entrar en el pueblo con el bus vimos una especie de playita que estaba llena de gente con toallas, aunque no llegamos a ir porque se puso a llover.
Si tuviéramos que elegir entre uno de los 2, nos quedaríamos con Bohinj, pero Bled también merece una visita y las fotos de Bled son espectaculares y eso que nosotros tuvimos mala suerte porque se empezó a llenar de nubes.
En Bohinj vale con unas horas relajadamente, en Bled para verlo bien se necesita bastante más tiempo, sobretodo si se quiere ir a la Isla, subir al castillo o ir a la Garganta Vingtar (una pena no tener un día más para haber visitado ésta).
Como ir de Bled a Ljubljana
Después de tomarnos unos heladitos y visitar un poco la zona del pueblo nos fuimos hacia la estación a tomar un bus de nuevo. Hayq ue coger nuevamente el bus que viene de pasar antes por Bohinj y para en la estación de Bled, que está más alejada del lago que la de Bohinj por lo que hay que salir con algo más de tiempo. Tardamos algo menos de 45 minutos en llegar a Ljubljana. El precio del ticket de bus Bled Ljubljana fue de 7€.
Esa noche aprovechamos a comer las enormes pizzas que habíamos visto el día anterior y tanto nos gustaron que volvimos a repetir!
Volvimos a dar vueltecitas por la pequeña y bonita capital y nos acercamos al barrio de Metelkova, una de las aglomeraciones más grandes de culturas alternativas de Europa.
Como era sábado noche, aquello estaba lleno de gente, todos con sus cervezas o copazos. Había conciertos de grupos y un gran ambiente. Estuvimos un rato por allí y nos volvimos a descansar, que mañana tocaba visitar Zagreb, en un un nuevo país, Croacia, y no teníamos decidido que tren coger, si el de primera hora o el de por la tarde, lo único seguro era que debíamos dormir en Zagreb!
Presupuesto (por persona):
– Compra supermercado Ljubljana: 5€
– Ticket bus Ljubljana – Bohinj: 9€
– Ticket bus Bohinj – Bled: 4€
– Ticket bus Bled – Ljubljana: 7€
– Cena pizzas y cervezas: 6€
– Helados: 2,5€
– Hostel Tresor: 27,5 €
Total: 61€